Prestadores, sanatorios y clínicas enviaron una carta a las
autoridades de la dependencia perteneciente al Ministerio de Salud.
Aseguran que no tienen recursos para afrontar las paritarias.
Ante la inminente homologación de la paritaria en el sector, empresas
prestadoras de medicina prepaga, clínicas y sanatorios enviaron una
carta a la Superintendencia de Servicios de Salud para solicitar “una audiencia con carácter de urgente”.
En ese sentido, el sector privado precisó a esa dependencia del
Ministerio de Salud que no disponen “de los suficientes recursos
financieros para afrontar una actualización arancelaria”.
En el escrito, que trascendió a los medios, los firmantes califican
de “insostenible” la situación que deberían “afrontar en el supuesto
caso de que dicha paritaria sea firmada sin el correlato de una
actualización arancelaria acorde con la magnitud del porcentaje
pretendido por el Gremio de la Sanidad del 25%”.
Asimismo, las prestadoras informaron a la Superintendencia que
solicitaron a la Asociación de Clínicas y Sanatorios de la República
Argentina, la entidad que los nuclea, que “se abstenga de firmar
hasta tanto se concrete la solicitud de Audiencia”
———————————————————————————————–
Como Moreno no las autoriza a subir la cuota, se niegan a pagar los aumentos salariales.
Como Moreno no las autoriza a subir la cuota, se niegan a pagar los aumentos salariales.
Un conflicto se incumba en la medicina privada, luego que la
paritaria de la Sanidad acordó una suba del 25 por ciento en tres cuotas
para los 70.000 trabajadores de clínicas, sanatorios, establecimientos
geriátricos, psiquiátricos y entidades prestadoras de servicios de
salud. El aumento arranca en agosto con un 15%, otro 8% en diciembre y
un 2% desde febrero de 2013.
Sin embargo, la principal cámara empresaria – ADECRA- dice que no los
puede pagar porque la Superintendencia de Servicios de Salud, ahora a
cargo de la santacruceña Beatriz Korenfeld, y la Secretaria de Comercio
Interior, de Guillermo Moreno, no autorizaron el aumento a las prepagas.
Y entonces estas entidades no les reconocen a las clínicas y
sanatorios los mayores honorarios y aranceles que surgen del incremento
de los costos, incluidos los que se originan en la paritaria.
“Una vez que nos autoricen a subir las cuotas, en la misma
proporción, les actualizamos a ustedes”, les dijeron las prepagas a
ADECRA. Con este esquema, las clínicas y sanatorios dicen ser el jamón
del sándwich.
Previendo estos aumentos, semanas atrás y como marca la ley de
medicina privada, las prepagas pidieron a la Superintendencia la
autorización para aumentar las cuotas un 15% y otro 9% en diciembre. Y
hasta mandaron cartas a sus afiliados anunciándoles el aumento
solicitado. De inmediato, a través de un comunicado, la Superintendencia
aclaró que no había autorizado ningún aumento .
Las clínicas descuentan que, como viene pasando en los últimos años,
las prepagas obtendrán la autorización para subir las cuotas. Lo que les
preocupa es la demora y el porcentaje que finalmente autoricen porque
argumentan que, sin actualización, no podrían pagar los salarios con
aumento. Y eso llevaría a un conflicto con FATSA, el sindicato que
agrupa a médicos, enfermeras, mucamas y personal administrativo.
Al Gobierno le preocupa la incidencia de la suba de la cuota en la inflación y en le humor de la clase media.
Las prepagas tienen 2 millones de afiliados voluntarios y otros 4
millones que derivan sus aportes a través de una obra social. Pero
también evalúan el impacto de eventuales paros si los trabajadores no
cobran el aumento.
Ismael Bermudez
Clarin
4/8/2012
Clarin
4/8/2012
No hay comentarios:
Publicar un comentario