Estrategia y resultados, dos pilares fundamentales.-

En la previa del Congreso Regional de Recursos Humanos, Miguel Ángel Rodríguez Olvera habla de la importancia del compromiso y la orientación hacia resultados.

En un contexto en el que las empresas avanzan a un ritmo tan vertiginoso como el del mercado, conceptos como alto compromiso y orientación a resultados resuenan entre los empresarios, especialmente a la hora de valorar las capacidades de sus empleados. Bajo premisas como estas, la Universidad Blas Pascal organiza el séptimo Congreso Regional de Recursos Humanos.

Ahora bien, ¿qué sentido tiene que los trabajadores compartan la óptica organizacional? El mejicano Miguel Ángel Rodríguez Olvera, doctor en Administración, especialista en gestión de Recursos Humanos y uno de los disertantes con los que contará el evento, lo explica en pocas palabras en diálogo con La Voz del Interior : “De eso depende el logro de las metas en todos sentidos: en lo financiero, en las relaciones con el entorno, en el clima laboral, en la satisfacción del personal”.

–¿Qué papel juegan las estrategias de la organización en estos casos?

–El hecho de que exista una visión general de lo que quiere lograr la empresa, permite que se desarrollen líneas estratégicas específicas en cada área o proceso, y que sean consistentes y congruentes con el foco organizacional. En este sentido, la función de recursos humanos como responsable de la gestión de las acciones relativas al capital humano, es desarrollar acciones que contribuyan con la visión estratégica de la organización vista como un todo.

Para Rodríguez Olvera, lo que las compañías piden de sus empleados depende de la posición laboral que se ocupe. Pero, más allá de esto, los trabajadores enriquecen su perfil poniendo de manifiesto ciertos “aspectos diferenciadores” que enriquecen el puesto, como los valores éticos, un alto compromiso, lealtad, responsabilidad, capacidad de trabajo en equipo, de negociación, de trabajar bajo presión, liderazgo y comunicación efectiva.

Pero a su vez, desde la otra vereda, los empleados también exigen la flexibilización de estructuras jerárquicas, que no siempre son aplicadas en la práctica. “Desde mi punto de vista, las relaciones jerárquicas no desaparecen de las estructuras organizacionales, sin embargo los modelos pueden modificarse buscando un trabajo más efectivo, más dinámico, más participativo, a través de trabajo en equipo, colaborativo”, indica el especialista. Aunque eso, aclara, requiere de un compromiso de la alta dirección para descentralizar la autoridad, la responsabilidad y la toma de decisiones. Algo no siempre fácil de lograr.

–¿Cómo ve al mercado laboral latinoamericano?

–Considero que los trabajadores latinoamericanos son competitivos internacionalmente, y eso representa un atractivo para inversionistas externos, porque encuentran personal capacitado y con mucho potencial a un costo menor que en otras zonas más desarrolladas. Esto es una ventaja competitiva pero, desde mi punto de vista, poco sustentable.

–Ese es un problema conocido, pero ¿qué soluciones hay?

–Creo que se requieren programas de capacitación y desarrollo mejor diseñados, estructurados e implementados, para potenciar las competencias de los trabajadores y de las organizaciones. Esto en ámbitos de conocimiento tecnológicos innovadores, que aporten mayor valor para reducir la visión que a nivel internacional se pudiera tener de estas zona, en relación a que es una posibilidad de oferta de mano de obra de bajo costo.

08/05/2011 00:02 | Sara Nasi (Especial)